jueves, 29 de septiembre de 2011

D. Fernando Fernández Suárez (I). Secretario del Ayuntamiento de Aldeadávila (1931-1939 ?)


El 14 de Abril de 1931, dos días después de las Elecciones Municipales que daban la victoria a republicanos y socialista en prácticamente toda España, se proclama la II República, y ese mismo año, en noviembre de 1931, llega a Aldeadávila desde Cacabelos un nuevo secretario para el Ayuntamiento: D. Fernando Fernández Suárez. En aquellos días era alcalde D. Pedro Pereña Andrés y médico D. Cesar García Mesonero (este último, el pobre, padecía de acidez de estómago -hiperclorhidria que dicen ellos-. Menos mal que había SERVETINAL).

Casi año y medio después de la llegada al Ayto. del nuevo secretario, el domingo 23 de Abril de 1933 volvieron a celebrarse Elecciones Municipales. Se trataba de una convocatoria para renovar a los concejales que habían sido elegidos dos años atrás bajo la ley electoral monárquica y que había sido abolida por la República. Por primera vez en España la mujer tenía derecho a voto en unas elecciones (1).

Las derechas del Bloque Agrario, integrado en la CEDA (2), conseguían en Aldeadávila los 9 concejales de los 9 que presentaban; las izquierdas de Socialistas y Radicales no conseguían ninguno de los 6 de su candidatura (3). D. Ángel Martín Martín había ganado la alcaldía.

A las tres menos cuarto de la madrugada del lunes 24 de Abril estalló un “petardo”(4) sobre el tejado de la casa que habitaba el secretario del Ayuntamiento, D. Fernando Fernández Suárez, en la calle El Rollo (hoy Cristóbal Martín Herrera). El “petardo”, lanzado desde la calle de la Sierra (hoy Salas Pombo), no ocasionó desgracias personales pero abrió un agujero en el tejado de 3 metros de diámetro y creó alarma y conmoción en todo el pueblo. En la casa había dos viviendas, en la segunda planta, bajo cubierta, vivía de alquiler como ya se ha dicho D. Fernando, el secretario, con su mujer Martina y sus dos hijos, Fernandito y Tinuca; en la planta baja vivía Don Juan, el juez de paz, con su mujer Filomena y sus 4 hijos: María, José, Jesús y Julia.







Al tiempo que nuestro médico promocionaba SERVENTINAL en multitud de periódicos y revistas de España, nuestro secretario, que disponía de automóvil particular, el único de Aldeadávila, si exceptuamos los de servicio público, participaba activamente en Madrid como representante del municipio de Aldeadávila en la redacción de las ponencias para la Ley de Coordinación Sanitaria.



La controvertida Ley de Coordinación Sanitaria perseguía la regulación, la ordenación de los servicios médicos y el reconocimiento de la profesión de médico. El caballo de batalla estaba en que la Ley fijaba unos incrementos de sueldo para los médicos de los que tenían que hacerse cargo los Ayuntamientos y la Unión de Municipios entendía que esto asfixiaba las arcas municipales. Este incremento de salario del que tenía que hacerse cargo el municipio fue lo que acabó enfrentando al gobierno con la entonces llamada Unión de Municipios y concretamente enfrentando al gobierno con el ayuntamiento de Aldeadávila (representado por nuestro secretario D. Fernando), puesto que el Ayto. de Aldeadávila acabó presentando un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley. El recurso finalmente no prosperó pero la Ley apenas pudo ponerse en vigor por la sublevación militar de julio de 1936 y el posterior estallido de la Guerra Civil Española.

1. LA GACETA REGIONAL DE SALAMANCA, 20 de abril de 1933, p.7. El nuevo factor político. La mujer en las próximas elecciones municipales
"
Van las mujeres españolas, el elemento femenino rural, a emitir su sufragio el domingo. No se amilanen, por lo nuevo, ni se exacerben por la pasión. Consideren que es su casa la que sale con ellas a la calle, la que han de defender y, desgraciadamente, corregir el rumbo y el matiz que le han dado los hombres equívocadamente. Y piensen que si ellas no salen a la calle, ésta seguirá en plano inclinado, y a su vez influirá grandemente en la vida privada, de la que es jefe la mujer por su espíritu de continuidad, por su mirada interna hacia el santuario del hogar, que es donde se acrisolan los ciudadanos, para las luchas de la vida pública.Salgan a la calle a defender, más que la vida administrativa de los Municipios, que es lo externo de las elecciones, las tendencias de orden, de familia, de educación, de religión, en una palabra, y salgan, porque es precesa su intervención, ya que son más fieles continuadoras de lo que los hombres no hemos sabido defender o no hemos podido mantener."

2. Las derechas, en la terminología de la época, llegaban a estas municipales y sobre todo posteriormente a las constituyentes de noviembre de 1933 unidas en torno a la C.E.D.A, Confederación Española de Derechas Autónomas. Uno de los grupos integrantes de la CEDA eran los carlistas, quienes vivieron un proceso de reunificación a lo largo de 1931 y 1932. Los tres sectores en que se encontraba dividido el carlismo (integristas, jaimistas y tradicionalistas) se reagruparon en enero de 1932. En 1933, los carlistas se aliaron con los monárquicos alfonsinos de Renovación Española, integrándose en la CEDA ante las elecciones de 1933 como se ha dicho antes.

3. El ADELANTO 26 de Abril de 1933, p. 6. Título de la crónica: "Desde Aldeadávila", y la firma: "El corresponsal Aldeadávila 24 de Abril de 1933"

4. "Artefacto Explosivo", en vez de "Petardo", para entenderlo hoy mejor. Al leer “petardo” nos vienen a la mente los petardos que compran los chavales en la feria y que hacen explotar al paso de la gente, de las chicas más asustadizas o dentro de una papelera para producir más estruendo; pero en la prensa de aquellos agitados años raro era el día que no se hablara de la explosión de un petardo, en tal o cual iglesia, o al paso de un tranvía, o a la entrada de una fábrica, y que causara grandes o pequeños destrozos. Hoy día se emplea más “artefacto explosivo” para diferenciarlo de petardo de feria. A modo de ejemplo, en la página 3 del periódico El Sur del sábado 5 mayo 1934 se pueden leer estas dos noticias: “Explosión de un Petardo en Alcoy. Alcoy 6:30 t. Anoche explotó un petardo en la casa 7 de la calle Rigoberto Algora. El artefacto destrozó los cristales y arrancó varias puertas. “ e igualmente en la página 3 “Estalla un petardo en la fachada de los plateros de Espuñez. 5 t. … Esta mañana explotó un pertardo en la fachada de la fábrica que causó gran alarma y grandes destrozos en cristalería